UN MEDIADOR ES NEUTRAL NO ES EL MEDIADOR DE LA OTRA PARTE AUNQUE LO DIGA TU ABOGADO.

Has de saber que cuando te encuentres ante un Mediador, estas ante una persona neutral que ama profundamente su neutralidad e imparcialidad, y que si no fuera así lo normal es que desista del proceso. Hace poco un cliente que acudió a AOH para intentar una mediación con otra persona, y que no llegó a practicarse me paso copia escandalizado de lo que el abogado contrario había puesto en la demanda sobre la mediación. Venía a decir para justificar su rechazo de la mediación, que el mediador era abogado y había sido elegido por la otra parte y que por ello rechazaba la mediación. Que barbaridad, que ignorancia y que mala fe, el asunto no requeriría mayor atención por mi parte sino fuera porque el abogado fue antes Juez y que estuvo durante un tiempo como noticia en los medios de comunicación. Casi hay que recomendar huir de un letrado de estas características como de la peste, ya que por lo que se vé, vela más por los intereses de su bolsillo que por los de su cliente y no ha aprendido a utilizar la herramienta de mediación para aconsejarla a sus clientes y como asesorar les durante el proceso de mediación.

Tiene que quedarte claro cuando leas este artículo, que es bastante habitual que la persona que tiene un conflicto con un tercero acuda a un mediador para informarse y más normal todavía que tras informarse de las bondades del proceso decida intentar antes de ir a juicio acudir a un mediador. También es normal que algunos abogados mas avanzados en técnicas de su ejercicio profesional vean útil recomendar a sus clientes acudir a mediación y saben cómo acompañar al cliente en el proceso.

La mediación no surge por generación espontanea y lo normal es que siempre hay alguien que de un primer paso, pues prefiere solucionar el problema y acudir a profesionales reconocidos que acudir al que le pueda tocar en un juzgado, o antes de que en los escritos de demanda o contestación se escriban cosas que luego dificulten el acuerdo.

El que una persona de el primer paso y acuda a una institución de mediación, o a un mediador, no convierte al mediador en el mediador de parte, sino que este sigue siendo mediador. El que sostenga que ese mediador es mediador de parte o tiene mala fé o mucha ignorancia a veces inexcusable.

Lo primero que les dirá el mediador es que es neutral y que lo normal es que el cliente haya preferido acudir a este sistema de resolución de conflictos en vez de ponerle una demanda. Este hecho de por sí ya facilita la consecución de un acuerdo.

Si incluso aún así existieran suspicacias, podéis proponer una comediación y elegir otro mediador, pero has de saber que ese mediador no será tu mediador sino que también será el mediador de la otra parte. Es decir será vuestro medidor.

A partir de que se acepta el encargo las dos partes sois los clientes del mediador que trabajará en beneficio de ambos.